Este concepto se usa en el contexto de la Economía y las finanzas públicas.
Economista italiano.
Se interesó en economía después de veinte años de práctica como ingeniero con preparación matemática y ciencias físicas.
Primero se interesó por la aplicación de las Matemáticas a la economía, como en el uso de las técnicas Estadísticas en los estudios empíricos.
Por ello sucedió a León Walras en la cátedra de Economía, en la Universidad de Lausanne, donde su obra continuó el método del Equilibrio general y la tradición matemática de la "Escuela de Lausanne".
Continuando la obra de Walras, enfatizó el concepto de Equilibrio general y las condiciones Matemáticas del mismo, llegando incluso a manifestar su esperanza, que abandonó más tarde, de que las variables de sus ecuaciones fuesen llamadas con valores cuantitativos derivados de datos estadísticos.
En sus obras más importantes, Curso de Economía Política (1896-97) y Manual de Economía Política (1906), se aprecian sus aportes al pensamiento económico, Metodológicamente Pareto se inclina por una teoría absolutamente formal y positiva, librando a la economía de todo elemento ético.
Cuando trata el problema general del Valor en la Utilidad de los Bienes Económicos, sostiene que la utilidad no es mensurable, bastando una concepción puramente "ordinal" de la misma para formular una teoría de la elección, pudiendo deducirse para cada individuo una escala de preferencias, sin suponer determinadas funciones de Utilidad.
Para ello adoptó los conceptos de "Curva de Indiferencia" y de "mapa de indiferencia", para demostrar la posibilidad de construir una teoría sólo a base de escalas de preferencia para mostrar los diferentes niveles de satisfacción que obtiene el individuo del Consumo de distintas cantidades de los Bienes.
Establece que el Intercambio entre individuos tendrá lugar dentro de un Mercado Competitivo hasta que se igualen las razones de las Utilidades marginales de los Bienes que ellos consumen con las razones de Precios de los mismos Bienes, pudiendo definirse un óptimo de Intercambio sin recurrir a comparar las Utilidades totales de cada individuo.
Prosiguiendo con su análisis, sentó las bases de la teoría del bienestar, cuando definió el Óptimo bienestar como aquella situación en que ninguna persona pueda estar mejor a consecuencia de un cambio, a menos que la situación de alguna otra empeore. Pensaba que la Competencia Perfecta necesariamente llevará al óptimo social de bienestar.
No obstante, cuando examina las posibilidades de una economía colectiva extrae una conclusión neutral: "La economía pura no nos da un criterio verdaderamente positivo para elegir entre un orden social basado en la Propiedad privada y el Socialismo. Este problema sólo puede resolverse teniendo en cuenta fenómenos de un carácter diferente".
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